Cinco ventajas de la movilidad empresarial con un ERP

Las ventajas de trabajar con herramientas eficaces en movilidad,  hoy en día, son indudables. El trabajo ya no está sólo en las instalaciones de la empresa, sino que se desarrolla en múltiples frentes en simultáneo, en diferentes localizaciones, horarios y con requerimientos de acceso de la información en tiempo real y desde diferentes dispositivos.

Es la hora del ERP en la nube, de las herramientas de gestión que dan servicio integral a la organización, proporcionado información de calidad para la toma de decisiones. ¿Qué ventajas aporta a mi empresa trabajar con un ERP en la nube?

1. Acceso a información en tiempo real desde cualquier lugar

Las herramientas que están pensadas para trabajar en movilidad ofrecen como principal funcionalidad el acceso a la información desde cualquier lugar conectado a Internet. Mediante un sistema de acceso seguro, se puede gestionar el acceso a la información por parte de distintos perfiles de usuarios, desde cualquier punto del planeta que disponga de conexión a Internet y sin necesidad de farragosas configuraciones técnicas a través de VPN o que requieran la instalación de certificados complejos.

Un ERP en la nube, permite consultar información relativa a los módulos a los que tiene acceso un usuario, desde cualquier ubicación en la red. De esta manera, se simplifican los requerimientos de infraestructura y hardware para las organizaciones, ya que un usuario puede acceder desde el entorno corporativo o desde otro punto, en caso de que se requiera el acceso en cualquier momento en el que no está dentro del perímetro físico de la organización. Todo ello compatible con las políticas de seguridad y control de la organización (registro de accesos, logs de operaciones, etc.).

2. El acceso a los datos es multidispositivo

A la hora de acceder a la información, la posibilidad de hacerlo a través de cualquier tipo de dispositivo es un “must”, es decir, un requisito imprescindible y que debe ser resuelto por un ERP en la nube. Se trata de dar respuesta a las necesidades reales de acceso a la información, que hoy en día tienen lugar desde smartphones, tabletas, ordenadores portátiles y de escritorio, con diferentes sistemas operativos.

Lógicamente, no se va a exigir la misma funcionalidad para todos los dispositivos, dado que por sus diferentes características no pueden realizar las mismas tareas, pero sí que se requiere alguna funcionalidad adaptada como, por ejemplo, el acceso a indicadores clave de gestión desde un terminal móvil.

3. Los datos viajan seguros

En un ERP en la nube, los datos viajan seguros. Cuando la información no está integrada en un ERP, el hecho de enviar documentos e informes de gestón por otras vías, (email, papel, carpetas compartidas, etc.) deja en entredicho la seguridad de la información, al estar poniendo en circulación información en soportes fácilmente replicables y transmisibles (ficheros PDF, Word, XLS) y al incrementar el riesgo de control no autorizado por existir diferentes plataformas involucradas en el tratamiento de la información.

En un ERP en la nube, el control de los accesos debe ser uno de los puntos fuertes, siendo la filosofía trabajar dentro de un “circuito cerrado”, pero disponible en cualquier lugar conectado y a través de diferentes dispositivos. Esto no es incompatible con la posibilidad de exportar información y la elaboración de informes ad hoc, sino que significa que la información fluye, pero en la mayor parte de las ocasiones dentro del sistema y sin necesidad de recurrir al envío de informes a través de otras plataformas.

4. Escalabilidad y aseguramiento del rendimiento

Un ERP en la nube permite escalar la infraestructura para atender las necesidades de carga de trabajo existentes en cada momento, incluso en casos de demanda estacional. Por ejemplo, a la hora de realizar consolidaciones de datos potentes, es posible que se requiera un servidor adicional para dar el servicio adecuado y que los usuarios no noten las consecuencias de un proceso de carga y comprobación de ficheros de datos.

A través de un buen diseño de infraestructura, un ERP en la nube es la solución ideal para tener el sistema a punto en todo momento. Con los sistemas de escalado flexible que existen hoy en día, las necesidades de procesador, memoria y disco se pueden atender en tiempo real, en función de los picos de trabajo existentes.

5. Disponibilidad garantizada

A través de acuerdos de nivel de servicio, con en un ERP en la nube se puede garantizar la disponibilidad de la información durante los períodos de trabajo, dejando todas las tareas de mantenimiento, copias de seguridad y actualizaciones, para ser programadas en el horario que mejor convenga.

Todo ello, de manera centralizada, sin tener que interrumpir el servicio o poner en peligro procesos clave de carga de datos, generación de informes importantes o transmisión de datos a las administraciones públicas o entidades bancarias (remesas, impuestos, nómina, etc.).