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Amazon Web Services, la división de cloud computing del gigante del comercio electrónico, sigue dispuesta a revolucionar el sector tecnológico. Ahora acaba de anunciar que en 2013 su nuevo servicio Redshift “reventará” los precios del almacenamiento en la nube ofreciendo 1 TB por unos 770 euros anuales.
Después de lanzar una oferta de almacenamiento online de bajo coste para pymes llamada Amazon Glacier, Amazon Web Services (AWS) pone ahora su mira en las grandes empresas con el lanzamiento de Redshift. Se trata de un almacén de datos relacionales en la nube que estará disponible a partir de 2013 con tarifas que pulverizan los precios de la competencia: desde 1.000 dólares al año (unos 770 euros) por terabyte. En comparación, los precios de servicios similares superan según AWS los 15.000 dólares.
De esta forma, la división de cloud computing del gigante del comercio electrónico Amazon lanza un duro órdago a rivales como IBM o HP, a quienes acusa veladamente de cobrar tarifas desorbitadas. En este sentido, a diferencia de Glacier (que tiene limitaciones en cuanto a las retiradas de datos, tiempo de restauración, etc.) Redshift no incluiría letra pequeña. Ofrecerá todas las funciones que los clientes empresariales esperan de un servicio de este tipo como escalabilidad, automatización, integración con otras soluciones de AWS, varios tipos de nodos a elegir, etc. También contará con herramientas de inteligencia de negocio certificadas de Jaspersoft y MicroStrategy que se incorporarán próximamente.
Amazon Web Services se reinventa
Redshift se presentó durante el congreso AWS re:Invent. Celebrado en Las Vegas, se trata del primer evento de la compañía dedicado a los servicios en la nube y contó con la asistencia de 6.000 socios, desarrolladores y clientes. Además de Redshift, AWS anunció también una nueva rebaja del 25% en los precios de Amazon Simple Storage Service (S3).
Desde su lanzamiento en 2002, la división Amazon Web Services ha captado decenas de miles de clientes, la mayoría pymes pero también organismos públicos e instituciones educativas. Ya genera el 10% del negocio de Amazon, pero no se conforma con eso. La compañía quiere dirigirse ahora a las grandes empresas, donde se enfrenta a competidores de la vieja guardia como Oracle, pero también a nuevos actores dispuestos a presentar batalla como por ejemplo Google.
Imagen: AWS.com
