Los amigos de lo ajeno suelen ir un paso por delante de las medidas de seguridad y cuando trabajábamos localizados en un despacho los hackers inventaron el phishing, (robar identidades vía mail para conseguir datos personales, bancarios, etc.). Ahora, con la deslocalización y el acceso masivo a nuestros datos
desde dispositivos móviles, los “cibercacos” han creado una nueva amenaza para todos; el Smishing. Con la extensión de la telefonía IP, las llamadas a través de Internet y los cifrados biométricos no tardarán en pedirnos mensajes de voz, pero vamos por partes.
Los tiempos en los que para acceder a Internet nos sentábamos en nuestro escritorio frente al PC quedaron atrás. Ahora estamos todo el día conectados con nuestro teléfono móvil… y somos doblemente vulnerables a sufrir ataques y robos a través de la red.
El smishing es una técnica que comparte objetivo con el phishing; suplantar tu identidad digital y acceder a tus datos personales, cuentas bancarias, redes sociales, etc. La diferencia es que este último invento utiliza los SMS para solicitarte esas contraseñas que en principio blindan tus cuentas.
Desconfía
De entrada, y para no tener que lamentarlo, si en la pantalla de tu Smartphone aparece un SMS con un mensaje que te pide verificar tu cuenta bancaria, desconfía. Y desconfía especialmente si tú no has solicitado cambios ni actualizaciones a tu operador de banca online. Algo que no solemos hacer y que podría poner las cosas más difíciles a los hackers es poner en conocimiento de nuestra entidad – y en su caso a la policía – del mensaje que nos ha llegado. En demasiadas ocasiones, por no perder unos minutos, lo dejamos pasar y estos mensajes campan a sus anchas por la red hasta que es demasiado tarde para muchos incautos.
Teniendo claro que la mejor opción frente al Smishing es no contestar a los mensajes hasta que no tengamos la confirmación efectiva de que es nuestra entidad la que nos solicita esa información, además de la precaución, otra de las herramientas a nuestra disposición para protegernos de este tipo de ataques en nuestro móvil son las aplicaciones (appks) anti malware. Podrás encontrarlas disponibles para cualquier sistema operativo y tanto gratuitas como de pago.
Y, por supuesto, especial atención en la red a aquellas páginas o redes que solicitan tu información para acceder a registros, participar en concursos o entrar en sorteos. Si eres de los que gusta de participar en este tipo de actividades en la red, te recomendamos que crees una identidad virtual con un perfil que utilices únicamente para estas cosas. Como método de pago, te recomendamos plataformas totalmente seguras como Paypal que puedes utilizar como monedero virtual en el que solo ingresas lo que quieres gastar. Y si comprar habitualmente por Internet y necesitas hacer pagos con tarjeta de crédito, nunca está de más tener una segunda cuenta bancaria con una tarjeta para realizar los pagos sin que nadie pueda acceder a tus cuentas.
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