El Congreso Nacional de RR.HH. de APD contó con la presencia de Sage

 

Congreso Sage APD 2014La Asociación para el Progreso de la Dirección (APD) reunió el pasado mes en el Palacio de Congresos de Valencia a más de 1.000 directivos procedentes de toda España para analizar los nuevos retos y tendencias en la gestión de los Recursos Humanos bajo el lema “En el corazón de la empresa”.

La relación entre formación y talento ha sido uno de los puntos centrales que se ha debatido a lo largo de la jornada. Así, según un estudio elaborado por APD y la consultora People Excellence, un 79% de los directivos consultados cree que no existe correlación entre lo que se enseña en las instituciones educativas y las necesidades de talento de las empresas españolas. En esta línea se ha expresado el director de personal de Ford, Pepe Abargues, son los centros formativos los que deben agilizar sus programas y dar una rápida respuesta a los nuevos desarrollos y necesidades de las empresas.

Eduardo Serra, presidente de Fundación Transforma, también ha hecho hincapié en la educación como pilar básico en la recuperación de la economía española tras la crisis. Para Serra, el sistema educativo actual está demasiado estandarizado, “no contempla ni fomenta el talento de cada individuo ni las competencias transversales, algo en lo que otros países de nuestro entorno ya nos llevan ventaja”.

Salario emocional

Susana Hidalgo, Directora de Capital Humano de Sage comentaba en la jornada como “la felicidad de las personas que conforman  nuestros equipos incide directamente en la cuenta de resultados”. Es lo que denominaba “salario emocional”. Por tanto es un elemento imprescindible la implicación, para que hacer crecer la pasión, la energía y que cada día vengan a trabajar no sólo cuerpos, sino también almas. Cuidar al trabajador, no tanto con incentivos económicos sino emocionales, es una de las tendencias para conseguir retener y potenciar el talento de los empleados.

Conciliación laboral, elemento motivador

El Congreso también ha abordado los nuevos retos en la gestión del talento. Y es que, la conciliación de la vida laboral se sitúa ya como el primer elemento de motivación de los empleados, por encima de la formación, la promoción interna o la retribución, según el estudio presentado por APD y People Excellence. Para Ricardo Díaz, socio de Human Capital de Deloitte, la nueva generación de ‘millennials’ reclaman a las empresas una mayor contribución social y ética, la aportación de programas profesionales y de promoción interna y que fomenten la innovación y la motivación. Siguiendo este argumento, Rafael Puyol, vicepresidente de Relaciones Institucionales del Instituto Empresa, ha destacado que este hecho unido al envejecimiento de la población se va a traducir en dificultades para encontrar talento en el mercado laboral español.

Por su parte, Cristóbal Paus, director de Recursos Humanos de Air Nostrum ha destacado la comunicación interna como piedra angular para recuperar la confianza y el liderazgo. “Es necesario establecer estrategias que fomenten la transparencia comunicativa y la sensibilidad y empatía desde la dirección”. En el ámbito de la gestión de la diversidad, Juan Chozas, director de recursos humanos de Bankia, ha destacado el apoyo de las nuevas tecnologías en la integración de los trabajadores en la organización.

Mejorar la productividad

Durante el Congreso, los directivos participantes han coincidido en señalar que España debe mejorar su productividad para ser competitiva. Según el estudio de APD, un 80% admite haber puesto en marcha medidas para mejorarla. Flexibilidad horaria y retribución variable son algunas de ellas. Pero el elemento clave que han señalado todas las empresas para mejorar la satisfacción de empleados y consumidores es la creación de una ‘cultura de marca’ alrededor de un producto o servicio.

Adolfo Fernandez, Head of Client Service de Millward Brown, ha destacado que las empresas tienen que dar un paso más allá, “sus productos tienen que contribuir a mejorar la vida de las personas. Tiene que haber una conexión entre ‘marca’, ‘producto’ y ‘empleado’”. La capacidad de las compañías para crear una filosofía alrededor del producto y convertir a sus empleados en prescriptores de esta filosofía es la tendencia que se está imponiendo en la actualidad. En esta misma línea, según Luís Miguel Peña, director senior de Llorente & cuenca, la cultura de marca se basa en generar un clima de confianza para que los empleados cuiden la reputación de su empresa.