La plena y auténtica participación de los ciudadanos en las tareas públicas, eso que se denomina “gobierno abierto” y que es una iniciativa que se está demandando desde diversos foros porque con Internet ya es viable, se abre paso tímidamente en nuestro país en algunos municipios.
Dentro de poco vamos a ser llamados a las urnas para elegir alcaldes y en muchas comunidades a sus gobiernos autonómicos, lo que nos da pie a reflexionar sobre la cosa pública y la participación ciudadana teniendo en cuenta las herramientas que tenemos al alcance para ser aprovechadas en este sentido.
Por supuesto, nuestro análisis no pretende tocar la vertiente política, que aquí no entramos, sino la enorme ventaja que supone la utilización de la red para acercar a los votantes / contribuyentes toda la información sobre el trabajo de sus representantes y el nivel de transparencia que se puede conseguir con un modelo abierto, del que sólo recelarían quienes tuvieran algo que ocultar. Y nos vamos a fijar en el ejemplo de un pueblo granadino llamado Jun de algo más de 3.000 habitantes.
La norma general en nuestro país es que las respectivas administraciones sean más bien opacas y rindan las cuentas justas, cuando lo lógico sería que informaran de todas sus actuaciones y decisiones, y justificaran cada euro gastado. Es decir, lo contrario de lo que suele ocurrir, y da igual el signo político del que mande.
Seguir en directo los plenos municipales
A día de hoy no debería extrañarnos que se pudiera votar desde el salón de casa o que existieran más opciones para enterarse de las decisiones de los regidores y no sólo por los medios de comunicación. Pero la realidad es que quien quiera votar tiene que hacer acto de presencia física el día que le convoquen, como desde hace 200 años, o enterarse a toro pasado de las decisiones que le afectan socialmente a través de los distintos canales de información.
El caso del pueblo al que nos referíamos, Jun, es un claro ejemplo de lo que todas las instituciones podrían hacer con un poco de voluntad y una aplicación informática específica desarrollada al efecto, con el fin de facilitar tanto a los encargados de administrar los contenidos y a los usuarios la usabilidad y la navegación.
Este municipio andaluz pone a disposición de sus ciudadanos una web desde la que pueden gestionar sus citas médicas, seguir en directo los plenos municipales, consultar las actas de esos plenos, los edictos y las ordenanzas, proponer ideas para mejorar el pueblo, conocer las actividades culturales y deportivas y seguir el videoblog que el alcalde tiene abierto en la página, con su “me gusta” para compartir en facebook y su botón de “twittear” para que no falte de nada. Con mucha voluntad y los medios que tiene a su alcance, este prototipo de democracia participativa mejoraría mucho con una aplicación específica trasladable al resto de administraciones.
Otras iniciativas
Los ciudadanos tienen derecho a saber y a una participación más directa y abierta, y las instituciones la obligación de poner a su alcance toda la información. Es lo que hace el ayuntamiento de Pájara (Fuerteventura) trasladando toda su actividad a twitter, o el de Segovia, una capital que puede servir de ejemplo para que otras ciudades de mayor dimensión aprendan cómo se puede servir a los ciudadanos cambiando una cultura política decimonónica a la nueva realidad de lo que es la función pública, poniendo el foco en los individuos.
En la misma línea de poner al alcance de cualquiera la información que poseen las administraciones y con el fin de crear nuevos canales de participación y comunicación con los ciudadanos, así como su reutilización comercial para generar valor y riqueza - movimiento “open data”-, en nuestro país se está abriendo paso esta corriente a través del Proyecto Aporta. Su intención es que tanta información dispersa sirva de materia prima que pueda ser transformada económicamente, además de ser una fuente de información para cualquier ciudadano.
Conclusiones
Aunque el ADSL y los teléfonos inteligentes no sirvan para nada en las próximas consultas electorales, o que muchas administraciones funcionen con un modelo que todavía da la espalda a sus administrados, la implacable realidad no tiene vuelta de hoja. El gobierno abierto y la administración 2.0 están muy cerca, lo que permitirá una mayor participación ciudadana y una buena oportunidad de negocio para quienes sepan verlo.
Más información:
Imagen: Jason Riedy
Fuente: Blog Sage Experience
Sobre el autor
JotaC es licenciado en Ciencias de la Información y desarrolla su actividad profesional en banca, en el área comercial.