Como podemos observar, gracias a los post del blog, la Inteligencia Artificial está presente en el quehacer diario de los diferentes sectores de actividad, o incluso en nuestro tiempo libre: videojuegos o deporte.
Esta semana quiero hablar sobre la utilización de la Inteligencia Artificial, en el sector primario de la economía, en concreto, en la agricultura.
El sector a escala mundial emplea una superficie de más de 15 millones de kilómetros cuadrados, de los cuales, desafortunadamente, casi diez millones desaparecen por la desertificación, ¿cómo afrontar este problema?.
Para hacer un uso más eficiente de los recursos agrarios, es muy común la utilización de herramientas computacionales, como, por ejemplo, los Sistemas Inteligentes.
Sería a principio de los ochenta cuando se comenzaron a utilizar las primeras aplicaciones informáticas en la agricultura, dichas aplicaciones únicamente resolvían tareas repetitivas, mecanicistas o de manejo de grandes volúmenes de información. Sin embargo, con la aparición de las Tecnologías del Conocimiento como por ejemplo, Smart Process Management, Redes Neuronales y demás técnicas de Inteligencia Artificial, aparece la utilización de los Sistemas Inteligentes en la agricultura.
El pasado 15 de julio el investigador Nicolás Kemper Valverde, del Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico (CCADET), presentó una red de Sistemas Inteligentes que alerta a los productores sobre el posible surgimiento de enfermedades y plagas más frecuentes en hortalizas y frutas, por ejemplo en cultivos como: limón, aguacate, fresa, etc.
"El objetivo es proveer de tecnología a los productores, para que tomen decisiones basadas en conocimiento experto y tengan un uso racional de pesticidas y fertilizantes, con lo que se consigue proteger el suelo, ser sustentables y ahorrar costos", detalló.
La pregunta que nos hacíamos al inicio del post, ¿cómo afrontar este problema? ya tiene respuesta, gracias a la aplicación de Sistemas Inteligentes en la agricultura, además de evitar la desertificación se consigue:
- Fácil gestión del conocimiento, información, recursos, etc.
- Reducción del tiempo en la elaboración de la planificación de cultivos y optimización del uso del suelo
- Centralización de toda la información relativa a los diferentes procesos, tipos de cultivo, principales amenazas, etc.
Referencias:
https://www.sag.gob.cl/OpenNews/asp/pagDefault.asp?argInstanciaId=1&arg…
https://www.mapa.es/ministerio/pags/biblioteca/revistas/pdf_reas/r149_0…
Guillermo Justo González
Departamento de Marketing de IActive